Hace 18 años (quizás más) comencé a caminar una hora diaria. Por aquel entonces vivía con mis papás. Primero salía sola. En algunos momentos, cuando no podía caminar por las noches, lo hacía en la mañana y caminaba la hora antes de entrar a la U. Con el tiempo comenzó a unirse mi mamá y luego, cuando me independicé, mantuvimos el rito y nos encontrábamos en la calle. De este modo caminábamos juntas, pero también conversábamos y nos poníamos al día. Luego me cambié de casa nuevamente, al tiempo mi madre falleció, pero yo sigo caminando, ahora acompañada de mi perra. Considerando sólo esta hora de caminata y dejando fuera todas los desplazamientos obligatorios que cualquier persona realiza (como los 20 minutos que caminaba a casa de regreso, eso no cuenta en este cálculo) y a razón de 4 kilómetros diarios durante 18 años, estoy en posición de asegurar que he caminado -al menos- 18.720 kilómetros. Dado que Chile continental tiene un largo de 4.329 kms., la distancia que he recorrido es de más de 4 veces Chile. Imaginen cuantos pensamientos, reflexiones, cuentos, divagaciones, elucubraciones, recetas de cocina, procedimientos, evaluaciones, y epifanías fueron quedando bajo mis pies. Quien lo diría! Alguien como yo, que nació con tantos problemas a los huesos, operada de cadera y rodilla, y que ha sido enyesada tantas veces.... Como dije en un escrito anterior, caminante no hay camino, se hace camino al andar y tal parece que yo soy una Forrest Gump de la caminata...
Comments